Festival de danza

Ayer fue el gran día en el que íbamos a hacer la exibición de las coreografías que habíamos aprendido durante el curso de danza. Danza árabe y polinesia. Dos danzas preciosas y totalmente distintas.

La verdad es que bailé muy agusto y lo que no pude bailar (a pesar de que me las sabía todas... muy a mi pesar no bailé por no poder comprarme el traje) lo disfruté como la que más. Laura y Amanda me acompañaban en mi pena ya que era compartida pero intentamos dar ánimos a las bailarinas, ayudarlas en lo que hiciera falta y si era conveniente animar al público que estaba un poco amuermado.

Salí con la moral a tope. Tuve la sensación de que a pesar de que los ensayos habían sido un desastre total y Pilar estaba desesperadita de la vida, que delante del público había salido mejor de lo esperado; pero cuanto más miro el vídeo más me doy cuenta de lo mal que fue. Pilar no se encontraba bien (estuvo al borde del colapso minutos antes de salir al escenario y mientras bailaba se equivocaba, me daba la sensación de que en cualquier momento se nos desplomaba allí en medio...) y no daba pie con bola la pobre, había otras que directamente no se habían aprendido la coreografía, otras que simplemente metían la pata (que es más normal), algún traspiés,... Pero lo más antiestético es que Pilar solo pidió que fuésemos todas en falda y hubo dos que por sus santas narices iban a ir en bombacho y fueron en bombacho.

En la polinesia era peor. La puesta en escena era mucho más espectacular ya que los trajes quitaban el hipo de bonitos que eran, pero a la hora de bailar las ondas de las faldas iban desacompasadas, unas por aquí otras por allá, los pompones otro tanto e incluso los movimientos de las manos! Cada vez que miro el vídeo veo más fallos y menos me gusta. Estoy deseando que Pilar abra una escuela de danza para poder ensayar en un lugar como es debido y los días a la semana que haga falta.

Andrea, la nuera de Pilar, que se marcó un solo con alas de Isis estuvo espectacular. No me canso de mirar su vídeo. ¡Genial! A ella no le dejó buen sabor de boca porque se equivocó en un par de ocasiones pero si no te sabes la coreografía ni nada ni se nota. La tía es que no disimula nada con la expresión de la cara que sinó nadie se habría dado cuenta. Aun así estuvo sobresaliente.

También me he dado cuenta de que por muy espectacular y bonito que sea el traje que me ponga para bailar estoy como un botijo de gorda y no me queda bien. Gracias por animarme chicas, pero el vídeo es el que es y no engaña. Me lo he planteado seriamente. ¡Hoy mismo me pongo a dieta! Tengo que perder peso como sea o me voy a ver como me puse después de tener a mi niña: ENORME.